miércoles, 9 de mayo de 2012

CRÍTICA DE "NO MIRES ATRÁS"

La ragazza del lago (2007)
Dirigida por: Andrea Molaioli
Música: Teho Teardo
Reparto: Toni Servillo, Omero Antonutti, Valeria Golino, Marco Baliani, Nello Mascia...

Argumento: Un pequeño pueblo italiano acaba envuelto en la
tragedia tras el hallazgo del cadaver de una joven a las orillas de un lago.
Un inspector llegará al lugar para averiguar quien es el asesino.



                                                 LAGOS, LAGUNAS Y OTROS VACÍOS
                                                                       Por Alejandro Chacón Ruiz.

 El arranque de "La ragazza del lago"(título original de ésta película...a saber el motivo de la absurda traducción española!) recuerda vagamente a los primeros minutos de la excepcional "Le septs jours du Talion", un thriller de Daniel Grou que aun no se ha estrenado en nuestro país.
 
Desgraciadamente, el filme de Andrea Molaioli no tarda es escaparse por otros derroteros mucho menos interesantes e inquietantemente pobres. "No mires atrás" se revela como una sucesión exasperante de amagos: es un amago de giallo, con su base criminal inoculada en el primer acto y evaporada casi instantáneamente según va avanzando el metraje.
 
Tambien es un amago de thriller sobrenatural, incluyendo una falsa premisa de leyenda urbana cuasi mágica que, pudiendo aportar un juego ambiguo entre fantasía y realidad, acaba reducido a los añicos de una linea tramposa y enrarecida de guión. Y además es un amago de intriga policiaca...más bien hay una investigación concienzuda, de dilatación confusa y resolución aséptica.

Curiosamente, el discurso más conseguido y mejor resuelto en la película de Molaioli está en su vertiente más inesperada y relegada a un triste segundo plano: su envés dramático, el concerniente al personaje del inspector Sandio (fabuloso Toni Servillo) y su destartalada familia.
En este sentido encontramos lecturas hermosas, confesiones apasionadamente creíbles y un dolor silente, resignado, que alcanza velozmente la garganta, anudándola.

A nivel interpretativo, además del citado Servillo, el resto del reparto cumple con corrección y solvencia, pecando, en ocasiones, de cierto desperdicio de talentos veteranos (el caso de Antonutti o Golino, por ejemplo, poco expandidos en la función) y abusando, en cambio, de una contención demasiado gris y plana.
Y si a lo incoloro del conjunto añadimos la exasperante banda sonora de Teho Teardo, chirriante y de un minimalismo nada agradable para los oídos, el resultado es abrumador.

"No mires atrás" es un lago en sí mismo que necesita un drenaje urgente para que el espectador encuentre en su fondo una tragedia humana universal que quiere ser hermosa y no lo consigue...
Y el porqué está en la superficie, cerca de la orilla, donde reposa la carne muerta de aquello que pudo ser y nunca jamás será.

NIVEL DE VICIO: 4


No hay comentarios:

Publicar un comentario